La alimentación es parte imprescindible en la que se fundamenta nuestro bienestar. Una dieta sana, equilibrada y variada, contribuye a mantener y potenciar
nuestra salud.Desafortunadamente, en la sociedad actual esta no es una premisa, la mayoría de las veces la prioridad es simplemente “saciar nuestro apetito” (en muchos casos, este apetito es consecuencia de estados de ansiedad, estrés o trastornos alimentarios) en vez de decidirnos por nutrir nuestro organismo.
La alimentación saludable ha sido sustituida por la comida rápida, preparada, precocinada, fritos, grasas, bollería industrial…
Cubrir las necesidades energéticas y nutritivas de nuestro organismo debe ser nuevamente una prioridad, adaptando nuestra dieta en función de la edad, sexo, nuestro estilo de vida, actividad deportiva…
En esta dieta, podemos incorporar alimentos que destacan por su elevado potencial nutritivo, los conocidos como SUPERALIMENTOS, los cuales nos aportan un extra de vitaminas, minerales, antioxidantes, fibra, proteínas, grasas saludables…
Te indicamos algunos de los más conocidos y utilizados, fáciles de incorporar a nuestra alimentación diaria:
ESPIRULINA: es una cianobacteria considerada superalimento desde hace muchísimo tiempo (consumido ya por los aztecas). Con una sorprendente variedad de elementos nutritivos (ácidos grasos esenciales, proteínas, vitaminas, minerales, ácidos nucleicos ADN y ARN, clorofila y una amplia gama de fitoquímicos). Su consumo ha sido recomendado por la O.N.U y la O.M.S. Atletas olímpicos incluyen la espirulina en su dieta para mejorar el rendimiento deportivo y la recuperación, así como fortalecer el sistema inmunológico.
La espirulina ha sido elegida por la NASA para enriquecer la dieta de los astronautas en las misiones espaciales.
No se puede poner en duda las bondades más que reconocidas de este superalimento.
COMINO NEGRO: debido a sus características aromáticas, es conocido como especia culinaria. En la India es muy utilizado por la medicina tradicional ayurvédica. Tiene un alto contenido en ácido oleico y linoleico, carbohidratos, proteínas, fibra, potasio, fosforo, magnesio, aceites esenciales…
Se han realizado ya diferentes estudios (todavía solo en animales) donde las conclusiones han sido muy positivas en los beneficios que producen las semillas de comino negro en el tratamiento de fibrosis renal y como alternativa a los antibióticos.
Las propiedades de estas semillas son las antioxidantes, antiinfecciosas, anti reumáticas, gastro protectoras…
HONGOS: ampliamente utilizados por la medicina tradicional china en sus diferentes variedades como:
- el maitake: sus propiedades nutricionales lo hacen altamente recomendable para personas que sufren de diabetes, hipertensión arterial, colesterol… su uso beneficia el sistema inmunológico, fortaleciéndolo. Aunque puede incluirse en la dieta, se recomienda como suplemento debido a sus efectos acumulativos, debe ser combinado con vitamina C para asegurar su absorción.
- El shiitake: con grandes propiedades tanto alimentarias (nos aporta proteína vegetal, vitaminas del grupo B, así como vitaminas A, C y E, hierro, magnesio, zinc..) como medicinales, ya que fortalece el sistema inmunológico, lo que ayuda en la prevención de alergias e infecciones; debido a su potente efecto antioxidante, promueve la regeneración celular y se está utilizando en el tratamiento de diferentes tumores; favorece la hormona del crecimiento. Muy recomendable en personas con enfermedades cardiovasculares.
- El reishi: utilizado ya hace más de 3.000 años por diferentes medicinas tradicionales orientales como la China, actualmente lleva años siendo estudiado por sus amplias propiedades y beneficios. Está considerado aun alimento adaptógeno (alimento que nutre el cuerpo para ayudarle a sobreponerse a situaciones de gran desgaste físico y mental). Tiene gran contenido en sales minerales, vitaminas del grupo B, 17 aminoácidos, entre ellos, todos los esenciales; guanosina y adenosina. El reishi se recomienda en todas aquellas situaciones que necesitamos fortalecer nuestro sistema inmunológico, así como en casos de problemas cardiovasculares, infecciones virales, diabetes, inflamaciones osteoarticulares, contracturas, hepatitis, cirrosis. Resulta de gran ayuda en épocas de insomnio, estrés y ansiedad…
SEMILLAS DE CÁÑAMO: Muy ricas en proteína vegetal, carbohidratos y fibra, sales minerales como fósforo, potasio, magnesio, calcio, hierro… y vitamina E entre otros. Son un excelente complemento alimenticio reconstituyente. A nivel medicinal, las semillas de cáñamo son utilizadas en casos de estreñimiento, artritis, dermatitis, prevención de la anemia, fibromialgia, fatiga, osteoporosis…
El aceite producido cuando las semillas de cáñamo son exprimidas es rico en ácidos grasos esenciales (debemos prestar atención a la hora de cocinar con este aceite, ya que puede oxidarse a altas temperaturas, generalmente no se aconseja para tal fin, mejor tomarlo en crudo).
Estas semillas son unas grandes aliadas en la prevención de enfermedades cardiovasculares, regulan la presión arterial elevada, disminuyen el colesterol dañino…gracias a sus grasas insaturadas, omega 6 llamado ácido y-linolénico, su consumo previene alzheimer y demencia.
Combaten la fatiga, mejoran el sistema inmunológico, alivian dolores articulares…