El reumatismo, también conocido como “reuma” no es una enfermedad específica, ya que existen más de 200 enfermedades de tipo reumático, siendo las tres más conocidas la artritis, la artrosis y la fibromialgia.
Podemos definir el reumatismo como un conjunto de síntomas que incluyen la inflamación, limitación en el movimiento articular e incluso la deformación de algunos huesos, lo cual provoca dolor y rigidez en articulaciones u otras estructuras musculares y óseas de manera crónica.
¿cúal es la causa del reumatismo?
Las causas son diversas, de ahí la importancia de un diagnóstico específico. Entre las causas más comunes podemos encontrar:
- Factores hereditarios
- Desequilibrios hormonales
- Tensiones psíquicas
- Infecciones
- Focos inflamatorios…
Enfermedades como osteoartritis, el origen puede estar relacionado con el peso corporal, la edad o un historial de lesiones deportivas. La artritis reumatoide y la artritis psoriásica, son alteraciones del sistema inmunológico, donde el sistema de defensa se vuelve en contra del propio cuerpo, atacando los tejidos sanos.
Enfermedades reumáticas más comunes:
- Artrosis u osteoartritis: es la degeneración progresiva del cartílago que recubre las superficies internas de las articulaciones en el que este pierde su estructura y la función para la que ha sido diseñado; básicamente, el cartílago pierde parte de su contenido en agua y las fibras de colágeno que le dan forma se rompen, con lo que disminuye su grosor, deformándose y como consecuencia, dificultando el movimiento de la articulación.
- Artritis: es la inflamación de una o varias articulaciones, pudiendo ser aguda o crónica con brotes ocasionales. La capa que recubre toda la articulación (membrana sinovial) es la que proporciona el líquido sinovial, que es el lubricante que permite a los dos extremos cartilaginosos que conforman la articulación, resbalen el uno sobre el otro y que produce el movimiento. El dolor persistente que caracteriza la hinchazón de la artritis, no remite con el descanso.
- Fibromialgia: es una forma de reumatismo en los tejidos blandos, no existiendo inflamación, pero si dolor y rigidez.
Factores de riesgo; aunque el origen exacto es desconocido, se sabe que diferentes factores influyen significativamente en su desarrollo, estos son:
- Las articulaciones del cuerpo tienen 3 funciones: la movilidad, la amortiguación y la distribución del peso del cuerpo. Si están sobrecargadas, tarde o temprano van a enfermarse.
- Mala alimentación: demasiadas grasas animales, fritos, harinas procesadas, dulces…e insuficiencia de nutrientes
- Hormonal: hay tipos de artrosis más frecuentes en las mujeres (manos y rodillas) y otros más habituales en los hombres (caderas)
- Deportes de élite y/o de alto impacto como el tenis, fútbol, baloncesto…deben practicarse con moderación y siempre después de haber realizado un chequeo completo.
- Causas mecánicas: cuando el cartílago es sometido a un esfuerzo continuado y repetitivo, se gastará antes y aparecerá la artrosis.
Ayudas para combatir las enfermedades reumáticas
Lo primero será acudir a nuestro proveedor habitual de la salud que nos derivará al especialista para diagnosticar correctamente que tipo de reumatismo padecemos. Complementando el tratamiento, podemos adoptar ciertos hábitos que nos ayudarán a mejorar los síntomas.
- Hidroterapia; acudir a un spa o balneario especializado en enfermedades reumáticas mejorará notablemente nuestra enfermedad gracias a tratamientos basados en aguas mineromedicinales, cataplasmas, barros, arcillas…
- Realizar actividad física periódicamente, solicitando asesoramiento multidisciplinar si fuera necesario (entrenador deportivo junto con fisioterapeuta)
- Reeducación postural si fuera necesaria. Una mala pisada, pies planos o cavos, mala alineación de las rodillas…son factores que a la larga influyen de forma negativa en nuestras articulaciones, por eso es tan importante la prevención desde la infancia.
- el efecto del sol es muy beneficioso, ya que favorece la capacidad de sintetizar la vitamina D, fundamental para mejorar el estado de huesos y músculos
- el nadar favorece la agilidad articular, evitando hacerlo en aguas frías
- El calor es otro de los factores clave en la mejora de los síntomas de estas enfermedades, ya que dilata los vasos sanguíneos por lo que ciertas patologías reumáticas, dolores, inflamaciones y contracturas mejoran en esta época del año.
Alimentación, suplementos vitamínicos, ejercicios específicos…todo ello te ayudará a la hora de combatir el dolor y retrasar lo máximo posible la aparición y desarrollo del reumatismo.
Consulta siempre con un profesional